El equipo de Ancelotti, así pues, y marcado por una crisis de identidad venida a más tras perder frente al Barcelona y dejar el liderato a seis puntos, será la nueva y potente prueba para un equipo, el nervionense, que no termina de borrar de una vez por todas aquella noche del 24 de septiembre de 2013 en La Coruña, que fue la última vez que venció lejos del Sánchez-Pizjuán. Hace ya 400 días y atrás han quedado interminables partidos y posteriores decepciones al ver cómo se perdieron oportunidades escandalosas para ganar en estadios aparentemente sencillos y ante equipos con menos capacidad, lo que ha conllevado a aumentar considerablemente las dudas en el último año de competición.