Debutar con un equipo siempre es motivo de alegría. Salvo que te metan cinco goles. Entonces, las sonrisas se convierten en tristeza. Fue el caso de tres de los cuatro fichajes invernales realizados por el Sevilla, que iniciaron su andadura en el equipo hispalense a contrapié. Layún en el lateral derecho, Roque Mesa en el centro del campo y Sandro en ataque hicieron su primera aparición con la zamarra blanquirroja en un partido que, ni ellos ni el sevillismo, olvidarán a corto plazo.