El presidente del Sevilla, José Castro, dispuso de su cuenta de débito personal en la entidad como si fuera «un cajero automático» para la disposición de dinero en efectivo. A través de esa cuenta, «sin límite de crédito», sin plazo de devolución, sin «supervisión alguna» y de la que no tenía que dar explicaciones a la entidad, se realizaron pagos para «actividades privadas o de familiares». Así lo reconoció ayer el director de Administración y Finanzas del club, Javier Cano Navas, durante su declaración como testigo ante la juez de Instrucción número 11 de Sevilla, Cristina Loma, que investiga al presidente del Sevilla Fútbol Club, José Castro, por presuntas irregularidades en el uso de la cuenta.