Una vez que el club ha logrado cerrar la contratación de Aleix Vidal, uno de los deseos expresos de la dirección deportiva encabezada por Joaquín Caparrós, las fuerzas se centran en firmar a ese delantero de referencia que satisfaga a Machín. Las características principales de lo que se busca son claras: un nueve alto, capaz de retener la pelota de espaldas a la portería y que vaya bien por alto. Y un jugador que cumpla estos detalles no está en la plantilla actual que maneja el técnico soriano. A fuego lento se trabaja en este asunto, la situación lo merece. Para esta posición, Caparrós está dispuesto a realizar la inversión más fuerte del verano y, también, de la historia del club. Saben en la planta noble del Sánchez-Pizjuán que el gol es caro y no quieren experimentos para una posición clave.