Contando también con propuestas procedentes de su país, Draxler tendría en consideración un cambio de aires, encontrando en la Liga española un destino en el que pueda contar con más minutos con los que seguir potenciando su juego. Aún así, la operación no resultaría ni mucho menos sencilla para los sevillistas. Tampoco lo sería la opción de Iago Falqué que la dirección de fútbol maneja para reforzar el ataque. A pesar de que al jugador le agradaría volver a España y vestir la camiseta sevillista, su actual club, el Torino, pide un precio demasiado elevado por él, unos 25 millones de euros.