No se dejaron ver ni Yassine Bono ni Óliver Torres, que ya se perdieron la última cita por sus respectivas dolencias musculares. A ellos dos se ha unido Éver Banega, en una ausencia que al principio hizo saltar todas las alarmas, hasta que los servicios médicos del club aclararon que el rosarino tenía un descanso pautado por la regulación de las cargas de trabajo. Óliver sigue aquejado de unas molestias en el sóleo de su pierna izquierda.