«El fútbol es un deporte de contacto y es una realidad que hay que asumir. Se ha querido caricaturizar al futbolista diciendo que hay más riesgo yendo a una farmacia y eso es demagógico absolutamente. El fútbol se salta los protocolos de cualquier otra profesión porque el contacto va a existir. Si hay que alargar la temporada y dejar tres semanas más de preparación, pues debemos hacerlo. Está en riesgo la salud de los futbolistas, con una exigencia desorbitada, jugándose la temporada en once partidos sin tener ningún encuentro de preparación. Hay cosas que se alejan de la realidad. Queremos la vuelta de la normalidad y del fútbol, pero que la salud de los futbolistas y el espectáculo estén garantizados. Que nos dejen jugar tres partidos amistosos y 15 días más entrenando».