Pero llegó el gran pacto por la gobernabilidad, de capital enemigo pero sevillista. Con Castro, Carrión, Del Nido, Alés, Guijarro… de acuerdo, y con la venta ya frenada, Sevillistas Unidos 2020 tienen poco que rascar. Así que seguro que han esperado el momento más adecuado, para ellos, para quebrar la unidad. No velan por su inversión, porque cualquiera que invierte no cambia lo que funciona. Pero eso no les interesa. Y Del Nido les ha puesto en bandeja una baza para intentar conseguir su verdadera pretensión. Ellos son intermediarios de una gran venta y lo único que quieren es su comisión. Y saben que la guerra, que ahoga a todos, puede ser el caldo de cultivo adecuado para tener una oportunidad de lograr sus pretensiones. Si logran pillar de una gran venta, les dará igual unos que otros.