“Diego Armando Maradona junto al balón para que Nervión viviera unos segundos de ansiedad para explotar en júbilo no más Diego le diera con la izquierda, Cedrún a un palo, el balón al otro, la grada a las nubes, subiendo al electrónico el primer gol que hacía el Pelusa con la camiseta del Sevilla”. Así narraba Manuel Ramírez Fernández de Córdoba en las páginas del diario ABC de Sevilla del 8 de octubre de 1992 cómo el sevillismo se había enamorado de Diego Armando Maradona. Un día antes, el Pelusa había jugado su primer partido en el Sánchez-Pizjuán y un gol suyo había dado la victoria a su equipo ante el Zaragoza. Casi 30 años después, la historia nos dice que el paso de Maradona por el Sevilla fue un periodo de luces y sombras, como lo ha sido toda la vida de uno de los mejores jugadores de la historia.