Los futbolistas del Sevilla no tuvieron las 72 horas mínimas de recuperación entre el partido ante el Rennes y la cita ante el Athletic y ello propició que las piernas pesaran en la segunda mitad. «No podemos hacer nada ni podemos buscar paños calientes. Todo el mundo sabe el desastre que existe y al que uno está sometido. Tenemos que convivir con jugar partidos de esta exigencia con menos de 72 horas. Hasta el minuto 60 hemos estado bien, pero después hemos acusado el cansancio», ha comentado el de Asteasu en la rueda de prensa posterior al encuentro. «Estamos sometidos a un cúmulo de circunstancias, hemos hecho unos cambios con arreglo a lo que teníamos preparado y a los jugadores de los que podíamos disponer, pero esto hoy ha hecho que perdimos un partido y perdamos los tres puntos».