A favor del fichaje, que se trata de un magnífico futbolista, que anda peleado con Gasperini sin opción de reconciliación y que el Atalanta apoya a su técnico e igualmente desea la salida del futbolista, no a un equipo del Calcio, no vaya a ser que triunfe, y sí a uno de un campeonato extranjero. Ahí está el Sevilla. El Papu llegaría para ocupar la mediapunta. Además es muy canchero, muy valiente en su forma de entender el fútbol y algo díscolo, cualidad que no asusta especialmente en Nervión. En contra está que el Atalanta no baja de los 12 millones de euros por un futbolista que el próximo mes se coloca en los 33 años y que además cobra 2,5 millones limpios. El tiempo puede correr a favor del Sevilla. Los últimos días serán decisivos para que las posturas se vayan aflojando.