El partido del sábado ante el Valencia se presenta calentito. El juicio ya está hecho, con José María del Nido y Monchi en el centro de las protestas. El sevillismo tiene muchas ganas de darle la pitada que se merecen. Si en el último encuentro ante la Real tronó AC/DC, esta vez hay dos factores que podrían mitigar el clima hostil: se despide un grande, Andrés Palop, ahora lesionado pero seguramente recuperado para ocupar un lugar en el banquillo. Y también se va a dar conocer justo el día del partido el diseño de las camisetas para la próxima temporada, de la marca Warrior. La maquinaria ya está en marcha. La ocasión lo merece.