El mismo «Pitbull» se mostró entusiasmado con el encuentro, ya que según declaró «por primera vez jugaré contra mi ex equipo, el de toda mi vida y que llevo tatuado en mi pecho. Es una felicidad enorme», por lo que los ojos estarán en el volante nacional, diputando por primera vez un partido contra el equipo que lo vio saltar al fútbol internacional.