Cristóforo, con la ventaja añadida de su pasaporte italiano, es el cinco argentino que quiere Unai Emery para equilibrar un equipo con muchas piezas de ataque y tanto en Sevilla como en Montevideo se da por hecho que jugará en el Sánchez-Pizjuán. Más o menos quedó claro la pasada semana tras alcanzarse un acuerdo entre Monchi y Daniel Delgado en base a la reunión que semanas antes habían protagonizado ambos en las oficinas del estadio. Delgado, el socio y mano derecha de Paco Casal en Europa, negoció con el Sevilla las condiciones económicas del jugador, los años de duración del contrato y estipuló un precio de compra para Peñarol.