El Sevilla volvió de la gira por Alemania con unas sensaciones horribles, 5 goles recibidos en dos partidos contra equipos de mitad de tabla de la segunda división alemana, además sin crear apenas ocaciones.
En el club andan preocupados por la dificultad que está teniendo Víctor Orta en dar salidas a jugadores, y Mendilibar también se impacienta, al ver que se acerca el comienzo de las competiciones oficiales y no llega nada nuevo y aprovechable.
Se daba por hecha la marcha de Kike Salas al Tenerife, habiendo un overbooking de centrales, pero la marcha casi segura de Rekik, las lesiones constantes de Marcao y que Badé aún no está al nivel físico necesario, cuenta el periodista José Gavilán, Mendilibar lo ha paralizado todo.
En teoría, una vez que todo esto se solucione o al menos parte de ello, Kike saldrá cedido con opción de compra al equipo canario, donde también esperan la llegada de Luismi.