La portería será un tema interesante a tratar para la próxima temporada. Lo que sí es seguro que el guardameta que tendrá la titularidad es Nyland. El noruego hizo una gran campaña y pese a que su fichaje fue muy criticado, calló muchas bocas y se convirtió en un fijo en el once.
Partiendo de esa base, existe la posibilidad de que en este mercado de fichajes veraniego, el Sevilla FC opte por cambiar a su segundo portero. Marko Dmitrovic no realizó buenas actuaciones el pasado curso y provocó inseguridad en la portería sevillista.
De hecho, cuando se lesionó Nyland, el equipo empeoró y encajó más goles con el serbio defendiendo los tres palos. El ex del Eibar está llamado a ser uno de los descartes de este Sevilla de García Pimienta, junto a Óscar, Augustinsson, Marcao, Januzaj y Joan Jordán.
Es más, la política de descartes del los nervionenses ha cambiado y si Dmitrovic no quiere salir, no jugará ningún minuto. La idea de la dirección deportiva es sacarlo de Nervión, pero su salida no es nada sencilla.
Ha rechazado varias ofertas de equipos como Rayo Vallecano y Valladolid, y otra procedente de Arabia Saudí.
Por el momento, ningún conjunto le ha ofrecido los 3 millones brutos que está cobrando en la capital andaluza. Asimismo, la frustrada salida de Dmitrovic, tiene en “stand by” la llegada de Álvaro Fernández, portero del Huesca.
El español está libre, pero su llegada está bloqueada hasta que no salga el arquero sevillista.