El Sevilla FC tenía el límite salarial sobrepasado durante la primera semana de competición y es que Iheanacho no ha podido jugar el primer partido en Las Palmas.
El club, tras no conseguir vender a Löic Badé, se ha visto obligado a regalar a Marcos Acuña a River Plate para poder inscribir al delantero nigeriano. Que dicho sea de paso, estaba ya algo molesto.
El adiós de Acuña ya ha permitido que pueda ser uno más para García Pimienta para el encuentro de la segunda jornada frente al Villarreal en el Ramón Sánchez Pizjuán y además, libera también un pequeño espacio disponible para ocuparlo con un lateral izquierdo.
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En las próximas horas, Valentín Barco, viajará desde Brighton hacia la capital de Andalucía para firmar su cesión con el Sevilla por una temporada. A pesar de haberlo intentado, Víctor Orta no consigue que haya opción de compra.