Rodri, el héroe de aquel partido en Almería que colocó al Sevilla cuarto en la última jornada, tres días antes de jugar la final de Copa del Rey ante el Atlético, vuelve a Nervión. Lo hace por segunda vez, ya que este mismo año, en abril, vino con el Zaragoza. Ahora afronta una nueva realidad en el Almería, donde espera asentarse por fin en la élite.