El Sevilla tiene un claro problema con el gol y es que ninguno de sus delanteros ha visto puerta en las primeras doce jornadas de Liga, algo que no ocurría desde hace más de cincuenta años en el club.
Es obvio, que esto no solo es culpa de Isaac Romero e Iheanacho, sino que también García Pimienta tiene que ver.
El entrenador debe encontrar soluciones, lo antes posible si no quiere complicarse la vida, buscando un sistema que haga que sus delanteros tengan más opciones de verse cara al gol.
Peque fue la temporada pasada el máximo goleador de Segunda División, el Zarra, marcando 18 goles con el Racing de Santander, y en el Sevilla tampoco ha marcado por ahora.
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Lo cierto es que en el equipo cántabro jugaba más de segunda punta, pegado al delantero, que de interior, más pisando el área, donde es más resolutivo.
García Pimienta lo estaba utilizando más retrasado y eso limita la capacidad goleadora del canterano del Barça, que quizás le vendría mejor estar más cerca de Isaac Romero.
