Sin haber sido un refuerzo de relumbrón, Vitolo se está convirtiendo en uno de los futbolistas que más suma entre los recién llegados al Sevilla. El canario está dando razones para creer en la confianza que Unai Emery ha tenido en él desde el principio, pese a que el propio jugador reconoció en el inicio de curso que le estaba costando hacerse al ritmo de una categoría en la que se está estrenando. El mediapunta reapareció en Valladolid después de cerca de un mes lesionado y leyó a la perfección un partido en el que Emery cambió el esquema, variando hacia un 3-4-3 en el que las bandas quedaron para los laterales largos y los extremos, Vitolo y Jairo, realizaron un buen papel como interiores. En Liberec no fue titular, pero su aparición en el terreno de juego terminó siendo determinante y no sólo por el gol del empate.