Dura derrota a la que recibió el Sevilla en el día de ayer frente a Osasuna. Los de Joaquín Caparrós viajaban a tierras navarras con la intención de traerse los tres puntos y asegurar la permanencia.
Sin embargo, el partido quedó truncado desde el principio, y es que muy pronto y tras recibir el único gol del partido, Lukebakio fue expulsado por un manotazo a Catena.
La realidad es que el belga sacó el brazo, mientras que el rival le agarraba, fue más un acto reflejo que una agresión como interpretó Cordero Vega en directo.
El VAR tenía que haber entrado, y es que en el acta pone el colegiado que se utilizó excesiva fuerza cuando no es cierto, simplemente quiso quitárselo de encima. El internacional con Bélgica, se mostró muy indignado en redes sociales tras el partido: «Errar es humano, pero con el VAR no hay excusas. Es inaceptable».
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Una vez han pasado las horas, y ya en frío, el extremo del Sevilla y máximo goleador de la temporada, ha lanzado un mensaje disculpándose con la afición y agradeciendo los mensajes de apoyo: «Me duele de verdad, lo siento mucho Sevillistas. ¡El cariño que me dais es incuestionable!».
