El sevillismo y el entorno en general culpan al vasco de la situación del equipo. Mala gestión de una gran plantilla o pensar sólo en el ataque, entre sus pecados.
El sevillismo y el entorno en general culpan al vasco de la situación del equipo. Mala gestión de una gran plantilla o pensar sólo en el ataque, entre sus pecados.