José María del Nido vive de forma muy especial las semanas señaladas, y ésta lo es por razones obvias. El presidente del Sevilla tuvo ayer una jornada intensísima de actos en la que evidenció que casi goza del don imposible de la ubicuidad. Con motivo de la Semana de la afición, estuvo con cinco aficionados privilegiados compartiendo una jornada de trabajo, incluidos en ella un comité de dirección y una visita al primer equipo en su sesión matinal de entrenamiento para motivar a los jugadores. Entre ambos actos, también estuvo presente en un acto del programa Sácale partido al cole, en Montequinto, cerca de la ciudad deportiva.