Emery acudió a la sala de prensa con el amargor de ese gol recibido que no ayuda a reforzar los conceptos que él busca y a la vez tranquilo por la clasificación matemática para la siguiente fase. El guipuzcoano, no obstante, contestó a una primera pregunta relacionada con la posición de Rakitic y el debate de los dos medios defensivos. Al técnico le preguntaban si había que dejarlo zanjado ya.