ESTADIO pudo conocer ayer que Serra Ferrer no ha recibido aún ninguna llamada desde la planta noble del Sánchez Pizjuán. Pese a ello, estaría dispuesto a negociar. En cualquier caso, no sería nada fácil, ya que el consejero delegado ha deslizado que no le dejaría marchar “por cuatro millones de euros”, ni mucho menos, entre otras cosas, porque le prometió a Joaquín Caparrós que no le vendería, para convencer al utrerano de que estampase su firma un año más como técnico en el Iberostar Estadi.