A los mandos del Sevilla, Unai Emery está pulverizando registros. Ya sean suyos mismos de la temporada pasada, o poniéndose a la altura de aquel equipo de la época de Juande Ramos, o desafiando sin complejos toda la centenaria historia del club. A todo esto además, hay que sumarle un hándicap muy importante con el que el técnico vasco ha sabido lidiar con arte torero.