Si el sevillista cierra los ojos y recuerda la final de Varsovia se le vendrá a su mente una cara, la de Bacca. El delantero colombiano fue el gran protagonista de la cita con el Dnipro por más que la UEFA decidiera darle el trofeo de mejor jugador a Banega, aunque si de verdad hay dos artífices de la gesta que consiguió el Sevilla en tierras polacas, éstos son Monchi y Unai Emery.