Con los 30 millones de euros que aparecían recogidos en la cláusula de rescisión del jugador y que pagará el conjunto italiano al Sevilla, Bacca representa la segunda mejor venta realizada por la entidad nervionense en estos últimos años, solo mejorada por Daniel Alves cuando se marchó al FC Barcelona, pase que engrosó las cuentas del Sevilla en 42 millones de euros.