Ante el Borussia, los miembros del equipo de trabajo de la UEFA quedaron encantados con el ambiente vivido en Nervión. Ni siquiera les desagradó que el himno de la Champions apenas se intuyera de fondo ante el estruendo de una afición volcada a la salida de los equipos. El detalle de Biris Norte con la pancarta de apoyo a los refugiados también gustó, así como el hecho de que no hubiera ni un insulto ni un incidente, sólo dos hinchadas volcadas con sus equipos en un ambiente apasionado de fútbol, propio de una gran noche europea según Sevilla.