Ni más ni menos que lo que se esperaba después de la última Junta de Accionistas de la sociedad Sevillistas de Nervión, la querella presentada por José María del Nido Carrasco y por José Gómez Miñán contra José Castro es la respuesta a la negativa rotunda de éste a permitirle el voto negando tanto la titularidad de las acciones tras una operación de compraventa como en representación del vendedor (su padre). Resulta estridente y llamativo por tratarse de un proceso judicial por la vía penal de un vicepresidente contra su presidente, sí, pero que todos los actores sabían perfectamente que estaba en el guión también es cierto.
