No hay secretaría técnica que se precie que no permanezca atenta a los jugadores que acaban contrato al final de la temporada en curso. Tampoco la del Sevilla. No hay que olvidar que cuando Monchi comenzó a ejercer no había mucho para fichar y, en tiempos de economía de guerra el ‘coste cero’ fue una norma impuesta por la situación del club.