El plan del Sevilla es incorporar juventud y calidad para ese puesto de central y ahí aparece el nombre de Bartra, que ha jugado muy poco en el Barça y tiene una cláusula de rescisión que ha bajado de 40 a 8 millones de euros al no haber participado en un mínimo de partidos esta temporada, de acuerdo con lo estipulado en su contrato, que vence en 2017.