En España el tema ha causado un revuelo relativo. Quizá un poco más en clave local, por nuestra relación profesional con Doyen Group pero ha habido poco ruido mediático general. Como suele pasar en nuestro fútbol los temas no tocantes de forma directa al Madrid o al Barça pasan medio desapercibidos ya que la inserción de dichos productos financieros en nuestro fútbol es todavía incipiente y de momento no atinentes a los dos mastodontes. En cambio en Portugal el tema ha sido una bomba (el Presidente de su Federación habla de “tragedia”) ya que, no en balde, no es que allí se estile el Fondo de Inversión como (co) propietario de los derechos de los futbolistas; es que sus principales clubes (Oporto, Benfica, Boavista o Sporting) tienen Fondo de Inversión propio que organiza la operativa de los derechos federativos de los futbolistas.