La primera de ellas en el ecuador de la primera mitad con una caída de Vicente Iborra en el interior del área. No señaló nada. El segundo gol de los blancos llegó en un córner que cabeceó al fondo de las mallas el francés Varane. Antes de su ejecución, los jugadores del Sevilla reclamaron una falta que nunca llegó a pitar. Y por último, la acción más protestada fue el penalti. Un presunto derribo de Mariano a Modric en el interior del área. En la repetición se aprecia que el contacto lo recibe de su compañero James.