El Sevilla, desde sus orígenes, está impregnado por un carácter rebelde que hoy más que nunca florece. Se trata de un club andaluz por los cuatro costados que se hace fuerte en una Andalucía madridista (y culé) hasta las trancas. Y pese a ser David ante los dos Goliats del fútbol español, se esmera en tocarle los cataplines a los dos grandes cada vez que puede. Y ha podido muchas veces, lo cual le reporta antipatía en muchos sitios, en su propia Andalucía y en el resto de España. Ese carácter rebelde e inconformista que le llevó a ganarle muchos partidos y finales a Madrid, Barça y Atlético catapultó a muchos hasta la irritación…
Ver Noticia[ad id=»88331″]