El Sevilla FC atraviesa una difícil situación económica, habiendo trazado un plan de contingencia para en unos tres años, volver a la regla del 1:1 en los fichajes.
Para ello, tiene como uno de sus objetivos conseguir ingresos extras, a través de la venta de los futbolistas con mayor valor de mercado.
Es por ello, que en este mercado invernal, además de intentar reforzarse con un extremo, un delantero y posiblemente un lateral zurdo, deberán escuchar ofertas por sus jugadores.
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La planta noble sevillista sabe que sus principales activos son Loïc Badé y Dodi Lukebakio, habiendo equipos importantes como Liverpool, Newcastle y Juventus, siguiéndole los pasos.
Estos clubes saben de las necesidades económicas del Sevilla, por lo que intentarán aprovechar la situación para firmarlos a un precio menor que el que les correspondería, debiendo claudicar desde Nervión, que dirá sí a cualquier oferta más o menos decente.
Ello, aliviaría las arcas de la entidad, pero conllevaría un déficit deportivo, que arriesgaría la tranquila, de momento, campaña que están realizando los de García Pimienta.
