El TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo), esas siglas que no quieren escuchar en Málaga y que el Sevilla ha intentando rehuir durante todo el campeonato hasta encontrarse como el octavo clasificado a tres jornadas del final, pueden estar muy presentes en el devenir de ambos equipos, salvo que el conjunto de Unai Emery haga la machada y se saque de la manga un parcial de tres victorias consecutivas en lo que queda de Liga, algo que, por cierto, no ha podido firmar en toda la campaña.