En este escenario, y tomando como referencia las alianzas habituales de los últimos años, el grupo de Castro alcanzaría una representación mínima del 36% con el apoyo de Carrión. El equilibrio es enorme, llamativo, puesto que Del Nido, con el teórico respaldo de Gómez Miñán y los americanos sumaría ese mismo 36%. Empate técnico, si es que alguno de los accionistas citados no varía el sentido de su voto, algo que nunca se puede descartar. Con tal igualdad, el papel de grupos como Accionistas Unidos y el sevillismo de base en general puede cobrar un peso decisivo a la hora de decantar la balanza de poder en el Sevilla FC.