Fue un fichaje tan extraño que nadie habló de él hasta que el Sevilla anunció su incorporación un martes por la noche en un programa en directo de su televisión oficial. Ese dato, que su nombre pasase absolutamente inadvertido entre los rumores siempre numerosos y llamativos de la prensa, supone un triunfo para los que se encargan de llevar a cabo las negociaciones porque evitan de ese modo levantar el interés de otros clubes más poderosos económicamente.