No es brasileño pero toca el esférico a ritmo de samba, con ese ritmo tan característico y personal de esos genios nacidos en Brasil. Bacca no nació allí, sino en Colombia pero su juego, su fútbol, su toque, y su claro referente al marco contrario le dan ese toque característico de los que entienden el fútbol como un arte por encima de todas las cosas.