El conflicto del calendario, pues, se resolverá con una final a partido único. Llegados a este pacto, que será el parto de la burra, habrá que buscar un escenario para dicho partido. En este caso, con el Barça campeón de Liga y de Copa, no hay que encontrar un estadio neutral. El Camp Nou debe ser el escenario de la Supercopa 2018 y el Club no debe ceder ni un milímetro de esta postura. Faltaría más.
