Perder la opción que el Sevilla se había fijado con el Cata Díaz supone ahora un cambio de estrategia en el sentido de que la cuantía de la inversión cambia. La situación económica de la entidad hispalense no permite un desembolso sin antes obtener liquidez producto de una venta y lo cierto es que en la tercera planta del Sánchez-Pizjuán casi hay rezos para que llegue una oferta por algún jugador, llámese Rakitic, Fazio, Medel o Negredo.