Las noticias que llegan desde Inglaterra son claras y rotundas. El Arsenal quiere a Gregorz Krychowiak, Arsene Wenger tiene al polaco entre sus preferencias y las arcas de los gunners tienen suficiente dinero como para afrontar de sobra el valor de su cláusula de rescisión, de 30 millones de euros. Pero en el Sevilla, por el momento, están tranquilos con el futuro del centrocampista y confían en que no se moverá este verano de Nervión.