El técnico argentino salió ayer por la tarde en tren rumbo a Madrid. Tras hacer noche en la capital de España, esta misma mañana ha cogido otro tren rumbo a San Sebastián. No quiere perderse el partido por nada del mundo. No sólo por la importancia que tiene en lo numérico, sino porque quiere hacerle ver al grupo que la unión cuerpo técnico-plantilla es indispensable en estos momentos.