Pecó el Sevilla de mala manera en el encuentro ante el Valladolid, dejando escapar una oportunidad de oro para hacerse con tres puntos que le mantuvieran en la lucha por los puestos de Liga de Campeones. Los de Nervión, a medida que pasaban los minutos, se fueron deshinchando, desaprovechando oportunidades, perdonando y cediendo terreno a un Valladolid que nunca bajó los brazos en su empeño por puntuar en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Y es que al Sevilla le sobró toda la segunda parte del encuentro ante el Valladolid. Tras unos primeros 45 minutos en los que los sevillistas saltaron al césped dispuestos a endosar un vendaval de goles a un Valladolid que pasó serios apuros defensivos, aflojaron la marcha y cedieron terreno a un rival que, con el paso de los minutos, se veían capaces de empatar.