Han transcurrido ya casi nueve años desde aquel zurdazo imponente de Antonio Puerta al que no pudo llegar el guardameta Rost en su estirada, pero el 27 de abril de 2006 siempre permanecerá en el recuerdo de todos los sevillistas. Aquel jueves, en plena Feria, como éste, se convirtió en una fecha mítica para una afición que no había disfrutado de una final de su equipo desde 1962, 44 años nada más y nada menos desde que cayera contra el Real Madrid en la Copa del Generalísimo en el primer partido de fútbol televisado para toda España.