Esta temporada 2014/15 está siendo muy rara para el Sevilla FC. El equipo empieza a decaer claramente, eliminado en Copa y apeado en Liga de los puestos de Champions (vaticino que de forma permanente esta temporada). Al mal momento deportivo se le suma un problema que está dejando mudo al Ramón Sánchez-Pizjuán. Los Biris han dejado de ser lo que eran. Ya Nervión no es un hervidero en cada partido y eso se nota cuando el corazón de Nervión no palpita. Rencillas con la LFP y desencuentros con la directiva han provocado todo esto. Vamos a analizarlo: