No es momento de analizar nada. Eso ya pasó. Los análisis hay que hacerlos en frío, sacar conclusiones y anticiparse, o intentarlo, a un devenir que se puede presentar más o menos halagüeño.
No es momento de analizar nada. Eso ya pasó. Los análisis hay que hacerlos en frío, sacar conclusiones y anticiparse, o intentarlo, a un devenir que se puede presentar más o menos halagüeño.