Sarabia se ha convertido en un excelente jugador que debido a su baja cláusula está muy expuesto al mercado. A continuación os detallamos las últimas novedades de su caso.
Caparrós, por ejemplo, se ha referido a la renovación de Sarabia, sobre la que afirma que es algo para Monchi; yo, ya la pelota”. Ha afirmado estar “contento con la vuelta de Monchi. Es de la casa y va a ayudar mucho al Sevilla a corto, medio y largo plazo. Le gusta la plantilla”. Según Caparrós, muchos jugadores actuales del Sevilla estaban en la agenda del último Monchi sevillista. Si en este mundo hubiera que apostar futbol diríamos que la renovación de Sarabia está complicada pero con la vuelta de Monchi ha podido dar un giro.
Nadie daba un duro por la continuidad del madrileño una vez que acabara la temporada por lo enquistada de una negocación que comenzó en verano y que sigue sin cerrarse. Historias de desencuentros entre el club y su representante, rumores de marcha a la Real Sociedad primero y al fútbol chino después… Su continuidad era una quimera, pero esta situación cambia radicalmente con la llegada de Monchi. Principalmente porque Monchi fue su principal valedor cuando Sarabia llegó al Sevilla en verano de 2016 y porque el director deportivo sabe tocar ciertos resortes en la negociación que van más allá de los años de contrato, la cláusula de rescisión o el sueldo del jugador.
La partida con Sarabia ha comenzado de cero. El madrileño acaba contrato en junio de 2020 y su renovación permanece estancada desde el pasado verano, con una baja cláusula de rescisión de 18 millones (pasa a 22 millones en el tramo final de cada ventana de mercado) que lo sitúa más fuera que dentro del club. Sin embargo, el aterrizaje de Monchi, el hombre que fichó a Sarabia del Getafe en 2016 para colocarlo en la élite futbolística, puede cambiar el panorama. De momento, la imagen que se produjo ayer en la ciudad deportiva fue llamativa a todas luces. Con la aparición en escena de Monchi, que mantiene una excepcional relación con el mediapunta, se abre una esperanzadora ventana en Nervión para intentar encauzar su ampliación de contrato.
El Sevilla entiende que le ha puesto por delante a Sarabia un contrato de primer nivel. El jugador no lo ha aceptado y ya se veía con los dos pies fuera del club de Nervión. La vuelta de Monchi, con el que le une una buena relación -como a la mayoría de los jugadores fichados por el Sevilla, por otro lado- ha abierto una nueva vía. Habrá reunión en las próximas semanas para colocar las cartas boca arriba. El director deportivo tratará de convencer a Sarabia de que la mejor opción deportiva -posiblemente no la económica- es la sevillista. Es la palabra de Monchi. Ninguna tiene mayor peso para un club de fútbol y para los profesionales. Un último intento para colocar la pelota en el tejado de Sarabia. Ser estrella del Sevilla o jugársela en una nueva aventura.