En los últimos años, el Sevilla FC no ha terminado de encontrar un entrenador que de con la tecla definitiva para sacarle el jugo a un plantilla hispalense que también necesita una reconversión este mismo verano.
Entre rendimientos muy alti-bajos y un coste de más de 20 millones de euros en despedir y contratar nuevos entrenadores, la situación del Sevilla se ha visto muy lastrada en este sentido.
Y es que, después de que el club ganara la séptima UEFA Europa League, Andoni Iraola pudo recalar en la capital andaluza de no ser por la presión que tuvo la cúpula sevillista a la hora de renovar a un Mendilibar que había salvado prácticamente al equipo de la quema de segunda división y lo había alzado de nuevo como campeón europeo.
Ahora, el otro técnico vasco se encuentra en el Bournemouth de la Premier League, siendo el undécimo clasificado con un presupuesto corto y con un proyecto muy interesante a medio-largo plazo.